Ortodoncia

Una dentadura mal alineada no es solo un problema estético, sino una cuestión funcional que acarree problemas de salud. La maloclusión o malposición de las piezas dentales puede traer como consecuencia la aparición de molestias e incluso, de enfermedades, como:

  • Lesiones dentales. Un mal encaje de los dos maxilares puede incrementar el riesgo de sufrir lesiones o fracturas de piezas dentales.

  • Dificultad en la mordida.

  • Mayor desgaste del esmalte dental. lo que, entre otros problemas, puede provocar sensibilidad dental.

  • Caries y enfermedades periodontales. La mala posición de las piezas dentales dificulta los hábitos de higiene bucodental, aumentando el riesgo de sufrir este tipo de afecciones.

Por suerte, en Clínica Dental Noreña podemos prevenir estas enfermedades corrigiendo la alineación de los dientes por medio de la ortodoncia.

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Ortodoncia infantil

La ortodoncia infantil es uno de los tratamientos más habituales realizados por odontólogos. Es muy recomendable implementar este tipo de procesos cuando somos niños o adolescentes, pues se pueden prevenir futuros problemas bucodentales.

Según la Sociedad Española de Ortodoncia (SEDO), lo ideal es que nuestra primera visita al dentista tenga lugar en torno a los siete años. A esta edad ya solemos contar con los incisivos y es el momento en el que aparecen los primeros molares. Esta primera visita nos ayudará a saber si el desarrollo de nuestros dientes es el correcto y detectar posibles alteraciones en la posición de nuestros dientes.

No obstante, cualquier edad es buena para someterse a un tratamiento de ortodoncia, ya que funciona correctamente en personas de cualquier edad.

Tipos de ortodoncia

Actualmente existen muchas opciones para aquellas personas que quieran lucir una sonrisa bonita y sana. Además de los brackets metálicos -los más habituales, ya que son una técnica rápida y efectiva-, los pacientes cuentan a día de hoy con otros tipos de ortodoncia en los que prima, además de la funcionalidad, la estética. Es el caso de los brackets cerámicos, de zafiro, la ortodoncia lingual y la ortodoncia invisible.

Además, en contra de lo que se suele pensar, los diferentes tipos ortodoncia no son dolorosos, aunque bien es cierto que pueden causar leves molestias en la fase inicial del tratamiento. La ortodoncia no dificulta el habla ni la masticación una vez que el paciente se habitúa a ellos.